sábado, febrero 17, 2018

Quinto libro 2018: "La Mennulara", de Simonetta Agnello Hornby.

Hacía mucho tiempo que no me gustaba tanto una novela. Es un libro de hace años (publicado en 2002) y no conocía a la autora ni me sonaba el título pero me llamó la atención la sinopsis que adelantaba la editorial y que, sin que sirva de precedente, os copio:
"En 1963, en el pueblo siciliano de Roccacolomba, fallece la Mennulara, así llamada por haber sido en su niñez una hermosa recogedora de almendras. El resto de su vida lo dedicó a servir con enfermiza lealtad a los acaudalados señores Alfallipe. Pero ¿cómo se explica que con el tiempo se convirtiera en administradora de los bienes de sus amos? ¿Y por qué éstos se resisten a cumplir sus últimas voluntades? En el pueblo no tardan en desatarse los chismorreos y, como piezas de un rompecabezas, esas voces darán forma al espléndido retrato de una mujer inolvidable".
Y es que no se puede contar mucho de la historia puesto que lo mejor que tiene la obra es ir averiguando la vida de la protagonista tal como nos la van contando sus vecinos ya que ella comienza el libro en su lecho de muerte y, salvo en algunos episodios restrospectivos en los que la oímos, son las mujeres y hombres que la conocieron o que creen conocerla quienes hablan de ella en un pequeño pueblo de Sicilia simbólicamente divido en dos partes, una alta y otra baja, y también social y políticamente dividido.

Desde el momento de su muerte seguimos a distintos personajes que estimaron u odiaron a la Mennulara y nos vamos dando cuenta que no dejó indiferente a nadie y de que las distintas perspectivas desde las que la conocieron influyen en opiniones diferentes, desde quienes la consideraron poco menos que una santa hasta quienes la tachan de fulana, desde quienes alaban su entrega como criada hasta quienes la ven casi como una mafiosa. 
Pasando las páginas del libro subimos y bajamos por las clases sociales, las ideas políticas, las envidias vecinales, la influencia subyacente de la siempre omnipresente mafia, los rencores, las ingratitudes, las críticas de los pueblos pequeños... todo ello en una manera magistral, a modo casi de thriller, hasta que cerca del final se nos acaban descubriendo las claves reales que llevaron a la Mennulara a ser quién fue y cómo fue, única diferencia de la novela con el mundo real, en el que no siempre llegamos a conocer en profundidad la vida de casi nadie.
Es una obra coral con muchísimos personajes, la mayoría con los prejuicios como los que cualquiera podamos tener a la hora de opinar sobre personas que no conocemos en profundidad influidos por nuestras propias opiniones, nuestro origen o nuestro nivel económico. Los criados la critican por excesivamente entregada a sus amos, los señores por darse demasiada importancia y atribuirse funciones que no le corresponden, los que no hacen bien su trabajo por demasiado exigente, alguno que tiene los libros de adorno la llama analfabeta, aquellos a los que en un momento dado puso las pilas, la acusan de mafiosa... en fin, la vida misma. 
En cualquier caso, lo que está claro es que La Mennulara no dejaba a nadie indiferente y resulta un auténtico placer lector avanzar por las páginas de su vida de boca en boca, de vecino en vecino, oír al cura, al médico, a los parientes, a su señora y descendencia, e incluso a quienes ya murieron y cuyo recuerdo sobrevuela por las habladurías. Nadie parece darle importancia por el hecho de haber sido criada y ser mujer negándole sus logros o atribuyéndoselos a un hombre, bien por negocios sucios o bien por relaciones amorosas con ellos, la mayoría de las veces sin ningún tipo de justificación. Cuanto hizo parece ser objeto de crítica entre los vecinos de Roccacolomba y, como la protagonista lo sabía en vida, los pone a prueba a modo de broma póstuma que les traerá las consecuencias que según cumplan sus deseos de ello derive. Un lujazo de novela. Os la recomiendo.

No hay comentarios: